Estudiar en la Biblioteca Nacional: hábito del chico listo

Fotos y texto por Maria José Vargas
Semana de Finales en tu universidad: necesitas estudiar. Buscar un asiento libre en la biblioteca es un faenón que tus rodillas ya no quieren negociar. Necesitas estudiar. No quieres saber nada con el sol que ataca las bancas del campus y matarías antes de sentarte a dejar seducir a tu estómago con el olor del menú de la cafetería de la universidad. Necesitas estudiar.
Regresas a tu casa. Necesitas estudiar. La pared de tu cuarto se remece con la cumbia de tu vecina. La puerta, cerrada, hace esfuerzos vanos por contener los gritos de tus hermanitos. Tu escritorio está aplastado por un morro de ropa sucia y los parpadeos de la luz de tu lámpara dan cuenta de su agonía. Por la ventana reconoces entre palmas y silbidos las risas de tus amigos de la cuadra. Necesitas estudiar.
La Biblioteca Nacional del Perú y sus bibliotecas periféricas son una opción inteligente a tu frustrante situación. Si ya estás harto de las sillitas de la cocina de tu casa, del campus universitario o de las mesitas de tu bodega de siempre, ir a la BNP a estudiar puede ser un gol de media cancha, un datazo.
Ir y hacer uso de ella es facilísimo. Agarra tu DNI y lleva 8 soles más tu pasaje. En 15 minutos tendrás un carné anual con el que podrás pasearte por varias salas de estudio, chinear algún libro o almorzar en el comedor el menú del día o simplemente abrir tu táper de arroz chaufa en la terraza lateral.
En pocas patadas:
Tu carnet de 8 soles (2.50 si eres menor de edad) te da acceso a todo documento (libros, revistas, periódicos...) publicado desde 1961 hasta hoy. Si quieres libros más antiguos (siglos XVI en adelante), tienes que sacar otro carnet y pagar más, pero eso es otro level.
Si quieres ir a estudiar, tienes tres salas: hemeroteca, humanidades y "sala de estudio". Cada una tiene sus pros y contras.
  • Sala de estudio.- Puedes entrar con tus libros y apuntes, pero es pequeña y suele estar algo llena (dos personas por mesa, promedio). Chinea:
  • Sala de Humanidades.- Para hacer uso de ella, es necesario que saques y hagas uso de algún libro de esa sala. Puedes colarte haciendo la finta de consultar un libro de allí, pero sólo si llevas separatas (no libros de fuera) para estudiar. Es decir: si quieres colarte a la sala de Humanidades, lleva tu separatita y saca cualquier libro, pero no lleves libros que no pertenezcan a la BNP.
  • Hemeroteca.- Mi favorita, por ser la más grande, ventilada y mejor iluminada. Debes pedir alguna publicación para poder usar una mesa... fácil: pídete algunas revistas del año pasado, agarra tus útiles e instálate al fondo. Eso sí: tu mochila o cartera será retenida.
Luego hay otras salas, pero tienen horarios variadísimos y son más específicas, por lo que será más difícil colarse a leer. Como última opción, existe el comedor. El encargado de la sala de Humanidades -buena gente- me dijo que hasta las 12 te dejaban estudiar en las mesas de la cafetería.
Y para los flojos, existen unos sillones rojos, enormes y de cuero, instalados en el primer piso. Hay poca luz, pero tienen una mesa con los periódicos del día y está cerca a la cafetería y a las máquinas.
Si deseas sacar ese popular libro de alta rotación que nunca llegas a reservar en la biblioteca de tu centro de estudios, no pierdes nada consultando el catálogo on-line de la BNP. La biblioteca es variada, compruébalo tú mismo (yo ya lo hice buscando y encontrando partituras de guitarra barroca peruana que Google jamás me mostraría). Además, consta de varios locales extendidos por Lima... así que te toca a ti ir a ver qué tan amigables y funcionales son las salas de la biblioteca periférica de tu distrito.
Anímate. Estudiar no es aburrido cuando pones interés en el tema. Y si estás lleno de distracciones, dudo que lo logres.

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